miércoles, 7 de diciembre de 2016

La racionalidad esquiva II

Mi amor es racional
como una palanqueta primera
porque no puede ser de otra forma
mi preocupación constante
por el corazón de este mundo.

Y tu dirás que esta contradicción es abominable
que el amor no es racional
y que son sólo delirios
del malestar profundo de un adolescente

Pero tu mirada está vedada
eres incapaz de separar tu codicia
de la mano gentil que acaricia
incapaz de separar tu deseo primero
del único deseo deseable.

No puedo creer que el amor
es sólo la total complacencia
de nuestras expectativas viscerales
y de los sueños.

Si te desarmas en alucinaciones
muy temprano o en la tarde
mientras millones de hígados
gritan que tienen hambre
tu amor son muros gigantes
y tus ojos incapaces
de derribar al yo que te domina
al yo que te complace
al yo que te droga
al yo que te idiotiza
al yo que te separa de todas las cosas buenas de este mundo.

Y mientras te elevas sobre nosotros como Gabriel
contemplando el eclipse de luna
de tu propio ego enamorado
alguien intenta vertirse
y ser medicina
felicidad del universo.

martes, 9 de agosto de 2016

Revelación de erres o erratas

No entiendo por qué debería escribir de las cosas que no son reales
No entiendo por qué no puedo escribir de esta lluvia que rompe cristales
Y en cambio me obligo a la elevación de tu amor falso
Que no me apacigua ni calma ni me hace sentir absolutamente nada
Que no liberará al mundo de las cadenas de oro, ni de los grilletes de plata, ni de los corazones de litio
No sé por qué mejor no hablo de estas personas que salen a cazar todos los días
Que van sumergidas en su anaquel de poesía
Yo sé que los saludas a las 3 y cuando estás sola en casa a las 10 te burlas de ellos
 Y te remites a la inconsciencia por naturaleza
Porque no puedes ver más allá que tu sangre púrpura

Y esa sonata de elevación inmerecida
Resonará en los ojos de un adolescente burgués en el futuro
Y eso sólo en el mejor de los sueños que alguna vez compartimos

¿o en el peor?

lunes, 8 de agosto de 2016

Moaning

Mientras algunos desembarcan en una calle del centro
otras son violadas al son de la lluvia oaxaqueña

mientras tú te quedas helado como un hombre de oropel
y secas tus labios con un vino mesiánico

Quizás nos corten la garganta un día esos que llamaste esclavos
y que saben sacudir una espada desde niños

estaremos teñidos de gris hasta los huesos
en un país de nadie y tan nuestro

y alabarás al Dios falso que escupiste
pero que es único en su condena

Cuando sea el dia del sufragio y escojamos
a nuestras almas o nuestros amigos

quizás sólo entonces la nube negra nos perdone
y Dios y Tlaloc y Oaxaca y los vinos
y las cartas
y los sismos

/Años de ser una irreverencia para taimarse en la desventura/

lunes, 25 de julio de 2016

Fuerza Bruta

Quien osara desear el vacío
siendo el vació el significante
deseará las ventajas alucinantes
que parecieran proporcionar
ciertos trajes y pieles
confeccionados de rumores
-baile el chamán en su sentencia
  las bóvedas de nácar no son del valle-

Lo que romperá
Odiseo
el prodigioso
son las cadenas que mantienen
a los trenes convertidos
en siluetas clandestinas

-¿no hay un vaso de agua
gratis en este país?-

Fue como el sueño que tuvo lugar en los ojos de un príncipe africano
hace 500 años en una noche de Marzo
cuando su cabeza rodó en Agosto
igual esos cristales eran
los más brillantes
-no hables
usa
la fuerza bruta-

Lo que pasó por aquí dejó este lugar atestado
de una mediocridad profunda

El que afanase el camino
de un golpe
el vació
será ausencia y
paréntesis.

Tarde

Siempre llegué tarde
para darte las gracias
para pedirte disculpas
para declarar mi amor


en los sueños antiguos no me encuentro
en los nuevos hay otros idiomas
no creo que mejores
que otras pulsiones


Y no diré que no quise volver a verte
por 20 segundos
martes por medio
en la víspera de los aullidos

No somos nada
¿seremos todo
en nuestra terquedad
de no ser algo?

viernes, 29 de enero de 2016

Capricornius

Estuve viajando un rato largo
esperando que la estrella cayera
y me partiera la cabeza

Alcancé a ver
como se alzan los amaneceres
mientras te pega el viento
en los altos de Toluca

Me miré fijamente en el agua cristalina
de una cascada azul
al son de decenas de vendedores de menúes
mientras nos preguntábamos
si las arañas del bosque
eran venenosas

Me dormi en lo alto
del templo de GI
esperando que las argentinas
me ofrecieran marihuana

Cuando el viento sopló de nuevo en la ciudad
te mire y te invité al castillo
que está en lo alto del Tepozteco
donde la felicidad son los coatíes

Y aquí estoy
al final
andando
recordando cuando me dijiste
que yo era una estrella